13.07.2025 12:35
“876. En este año, el ejército enemigo eludió al ejército de los sajones occidentales y entró en Wareham; entonces el rey hizo la paz con el enemigo, quien le entregó rehenes, que eran los hombres de mayor rango después del rey en el ejército, y le juraron sobre el anillo sagrado (algo que no habían hecho antes por ninguna nación) que abandonarían su reino rápidamente. Y luego, amparándose en esto, el ejército montado se escabulló de noche del ejército inglés hacia Exeter.
“877. En este año, el ejército enemigo de Wareham llegó a Exeter; la fuerza naval navegó hacia el oeste bordeando la costa y se enfrentó a una gran tormenta en el mar, hundiendo 120 barcos en Swanage. El rey Alfredo cabalgó tras el ejército montado con el ejército inglés hasta Exeter, pero no pudo alcanzarlos antes de que llegaran a la fortaleza, donde era imposible alcanzarlos. Allí le dieron rehenes, tantos como quiso, y tras grandes juramentos, mantuvieron una paz firme. Luego, en la época de la cosecha (agosto), el ejército se dirigió a Mercia, repartió parte de la cosecha y le dio otra a Ceolwulf (II, rey de Mercia).
“878. En este año, en pleno invierno después de la duodécima noche, el ejército enemigo llegó sigilosamente a Chippenham y ocupó la tierra de los sajones occidentales y se asentó allí, y expulsó a gran parte del pueblo a través del mar, y conquistó a la mayoría de los demás; y el pueblo se sometió a ellos, excepto el rey Alfredo. Viajó con dificultades a través de los bosques y fortalezas de los pantanos con un pequeño ejército.
“Ese mismo invierno, el hermano de Ivar y Healfdene (Ubba) se encontraba en el reino de los sajones occidentales, en Devon, con 23 barcos. Allí murió, junto con 840 hombres de su ejército. Allí fue capturado el estandarte que llamaban Cuervo.”
“Posteriormente, en Pascua (23 de marzo), el rey Alfredo, con un pequeño ejército, se atrincheró en Athelney, y él y la agrupación del pueblo de Somerset más cercana procedieron a combatir desde allí contra el enemigo. Luego, en la séptima semana después de Pascua, cabalgó hasta la Piedra de Egberto, al Este de Selwood, y allí salieron a su encuentro todos los habitantes de Somerset, de Wiltshire y de la parte de Hampshire que estaba al Este del mar, y se alegraron de verlo. Una noche después, partió de ese campamento hacia Iley (cerca de Warminster), y otra noche después hacia Ethandun (Edington), donde luchó contra todo el ejército, lo puso en fuga y lo persiguió hasta la fortaleza, permaneciendo allí quince días. Y entonces el enemigo le dio rehenes preliminares y juró con firmeza que abandonarían su reino, y prometió también que su rey sería bautizado, y cumplieron su promesa. Tres semanas después, el rey Guthrum, con treinta de los hombres más importantes del ejército, acudió a él en Aller, cerca de Athelney, y el rey lo apadrinó en su bautizo allí; y la desagregación del crisma tuvo lugar en Wedmore. Estuvo doce días con el rey, quien lo honró a él y a sus compañeros con grandes regalos.”
Crónica anglo-sajona. Edición de James Ingram y J. A. Giles, Londres, 2016.
Selección y adaptación al castellano actual de Víctor Manuel Galán Tendero.
