BUCHENWALD Y EL HOLOCAUSTO. Por Noemí Jodra, Sandra Navarro e Inés Romero.

13.06.2014 17:29

El Holocausto fue la persecución y el asesinato sistemático, burocráticamente organizado, de aproximadamente seis millones de judíos por el gobierno nazi y sus colaboradores. "Holocausto" es una palabra de origen griego, que significa "sacrificio por fuego." Los nazis, que tomaron el poder en Alemania en enero de 1933, creían que los alemanes eran una "raza superior" y que los judíos, considerados "inferiores", no merecían vivir. Durante el Holocausto, los nazis también tuvieron en su mira a otros grupos por razón de su percibida "inferioridad racial": los romas (gitanos), los discapacitados, y algunos grupos eslavos (polacos, rusos, y otros). Otros grupos fueron perseguidos por razones políticas, religiosas o de orientación sexual: comunistas, socialistas, testigos de Jehová y homosexuales.
Dicho Holocausto fue llevado a cabo fundamentalmente en campos de concentración y de exterminio. Un campo de concentración es un espacio en el cual se detiene o se recluye a personas, habitualmente bajo duras condiciones de vida y sin respeto a sus derechos ni a las normas legales básicas de arresto o encarcelación. El nazismo hizo de los campos de concentración uno de sus pilares fundamentales.
Los primeros campos de concentración en Alemania fueron creados a partir de la llegada de Hitler al poder en 1933. En esos primeros centros fueron recluidos enemigos políticos del régimen, mayoritariamente miembros del Partido Socialista y el Partido Comunista Alemán y su organización corría a cargo de las SA y la policía.  Poco a poco, los nazis disolvieron la mayoría de los primeros campos y los sustituyeron por grandes campos de concentración y de trabajo centralizados bajo la jurisdicción única de las SS.
En 1939 existían seis grandes campos principales:
- DACHAU (1933) - SACHSENHAUSEN (1936) - BUCHENWALD (1937) - FLOSSENBÜRG (1938) - MAUTHANSEN (1938) - RAVENSBRUECK (1939)
Después de 1939, el sistema de campos de concentración se extendió rápidamente hacia Europa Oriental y adquirió grandes dimensiones con la aparición de los campos de exterminio.
Los campos de exterminio nacen a partir de verano de 1941 como una forma de aniquilación masiva de la población judía. Desde 1939 había comenzado un proceso de "guettización" que llevó a agrupar a los hebreros de Alemania y de los territorios ocupados en barrios de determinadas ciudades, en los que eran aislados del resto de la población. En estos campos, las personas eran sometidas a condiciones infrahumanas, hacinadas en barracones, muchas fallecían por hambre o por epidemias; el resto eran aniquiladas. 
Los alemanes comenzaron aplicando técnicas de exterminio utilizadas anteriormente con deficientes mentales (asfixia en camiones especiales utilizando gases provocados por la combustión del motor). Terminaron desarrollando un sistema que utilizaba el gas Ciclón B para asesinar de una sola vez a cientos de personas en cámaras de gas que luego eran incineradas.


De todos los campos de exterminio destaca Auschwitz,  probablemente uno de los más conocidos, pero nosotras tomaremos como ejemplo para nuestro trabajo el de BUCHENWALD.
El 15 de Julio de 1937 llegaron los primeros internos al campo de concentración Ettersberg, más tarde nombrado Buchenwald. Se encontraba sobre la montaña Etter, en la población alemana de Weimar. A finales de ese mismo año albergaba 2561 presos, entre los que había miembros de la resistencia, testigos de Jehová, criminales habituales y algunos homosexuales. Ese verano los primeros 48 asesinatos se produjeron en el crematorio municipal de Weimar, debido a la falta de medios en el campo.
En 1938 ya contaba con 11028 presos, debido a la llegada de judíos y presos austriacos que utilizaron para la construcción; y 711 muertos, de los cuales 408 eran judíos. En el último año de su existencia (1945) se había convertido en el mayor campo de concentración que seguía en funcionamiento, ya que también contaba con 88 subcampos a sus alrededores. En él había 112000 personas, de las cuales un tercio eran judíos.
Una estimación sitúa el número de muertos en 56.000.
El campo estaba dividido en dos grandes zonas: el campamento de prisioneros y el área de las S.S. Veamos algunos de sus lugares más significativos:
En el campamento de prisioneros, la Gatehouse fue uno de los primeros edificios construidos por los presos en 1937. Sirvió como la atalaya principal de las 23 torres de vigilancia. A través de unos altavoces situados en él se realizaban todos los avisos. En el ala izquierda del edificio estaba la prisión del campo, el "bunker" temido; el ala derecha contenía las oficinas de la protección del campamento de las SS. En el reloj que contenía se quedó grabada la hora y fecha de liberación del campo: 11 de Abril de 1945 a las 15:15.
Otro lugar emblemático fue la puerta de hierro forjado en la que se puede leer desde dentro la frase "A cada uno lo suyo".
La "plaza de los llamados" era donde se pasaba lista. También se realizaban apelaciones que podían durar hasta 72 horas, cuya función era solamente la degradación humana aterrorizando a los prisioneros, y torturas a prisioneros como azotes o colgamientos en la horca.Se les hacía formar justo al frente del portal, para que pudieran ver las ametralladoras de la torre y escuchar los gritos de las torturas en el bunker.
En el primer piso del crematorio se encontraban los hornos donde se quemaba a los presos.En el subsuelo se saqueaban los cuerpos robando los dientes de oro, rompiendo los huesos o poniendo la piel hacia fuera para la preparación de los esqueletos. Y también se colgaban cuerpos de una especie de ganchos que había en lo alto de las paredes. En un edificio anexo fue instalado un edificio con apariencia de consultorio médico, donde se hacía entrar al paciente solo a un cuarto, para medirle la estatura, y del otro lado, por medio de un orificio, un oficial le disparaba.
La enfermería era una barraca normal y corriente donde casi nadie se atrevía a llegar, excepto que se sintiera demasiado mal, o que tuviera algún privilegio dentro del grupo; ya que no sabían si lo salvarían o lo matarían, por las palabras de la comandancia: "en este campo solo hay vivos o muertos". Se construyó por la presión de los presos políticos, que empezaron a atender en ella, sin tener conocimientos médicos; después se permitió que quienes los tuvieran, ayudaran allí a sus compañeros. La mayoría de los enfermos se intentaban tratar entre ellos por ese temor a ser asesinados o usados para experimentos y acababan por matarse.
Este campo y los otros muchos que aún existen en Alemania y en la Europa del Este, constituyen un recordatorio perpetuo sobre el nivel de crueldad al que puede llegar el ser humano; y conocerlos, aunque sólo sea a través de pequeños trabajos como éste, es algo absolutamente necesario para que la humanidad no vuelva a caer en la locura de la autodestrucción.