HÉROES GRIEGOS DEL SIGLO XXI, LOS UCRANIANOS.

05.03.2022 10:59

               

                En nuestros libros de historia, la resistencia de los griegos contra los persas era relatada con vivo interés. Las guerras médicas no eran cualquier cosa, para ser tomadas en broma. Heródoto, el padre de la historia, nos las refirió con colores vivaces, los de las complicadas batallas que fueron ganadas a los persas por unos griegos políticamente divididos. La muerte de los espartanos en las Termópilas, con Leónidas al frente, adquiriría una aureola mítica. Aquellos caídos ejemplificaron la abnegación de los que llevaron su compromiso hasta las últimas consecuencias. Los griegos que tomaron las armas por sus libertades vencieron finalmente a las numerosas tropas del rey de reyes, que llegaron a ser alineadas desde el interior de su imperio hasta los estrechos del Bósforo y de los Dardanelos. Los atenienses que contemplaron la desolación de su ciudad no dejaron perder su independencia y su muralla de madera, su armada, venció en Salamina a la de su oponente.

                Para muchos historiadores, las guerras médicas fijaron los primeros límites entre el mundo asiático, el del egregio Oriente Próximo, y la naciente Europa, que no se dejó raptar por nadie que se creyera casi divino. Unos europeos políticamente divididos se alzaron con el triunfo frente a un imperio monolítico, ya que supieron movilizar sus mejores energías que sus enemigos, que en la víspera los habían menospreciado por sus tumultuosas asambleas. Europa nació hace unos 2.500 años y volvería a revalidar su personalidad peleona a lo largo del tiempo.

                Hoy un Estado con pretensiones imperiales, Rusia, trata de dominar un país que considera de su patrimonio, Ucrania. El ejército de aquélla, sobre el papel, supera con mucho al de las fuerzas ucranianas, que se han visto reforzadas por la resistencia popular, muy en la línea de las guerras de independencia de otros países, como la de la España que se encaró con Napoleón. Se habla mucho acerca de si Putin ha querido aplicar toda su fuerza sobre el terreno, en busca de una intimidación favorable a sus intereses, pero lo cierto es que contra viento y marea los ucranianos no se han dejado conquistar sus ciudades, no se han sometido. Su valentía ha conmovido a la opinión pública europea, que secunda la causa de Ucrania.

                Los europeos todavía estamos separados, por mucho que tengamos en común, y la Unión Europea ha pasado por horas muy bajas tras la salida del Reino Unido. Algunos comentaristas nos vienen criticándonos desde hace tiempo, caracterizándonos de parque de atracciones turístico sometido a la voluntad y la violencia de otros. De sus hedonistas gentes poco puede esperarse, pues son señoritos que viven de rentas. En verdad, somos como los griegos del siglo V antes de Jesucristo, desunidos y unidos a la vez ante ciertas situaciones. Nuestras sociedades democráticas acumulan reservas de energía, inteligencia y poder que los dictadores no tienen en cuenta. Los ucranianos están hoy demostrando su temple. Son el escudo de Europa. Y aunque Putin y sus secuaces les puedan ganar batallas, al final triunfarán. Toda ocupación o imposición está condenada al fracaso ante tal demostración de voluntad popular. Ucrania siempre será libre y su valentía eterna.

                Víctor Manuel Galán Tendero.