LAS ARCAS DE LA CIUDAD: LA VERTIENTE SOCIAL DE LA HISTORIA ECONÓMICA.

15.11.2014 20:51

 

                A muchas personas la economía les resulta una tierra inhóspita en extremo, máxime si añadimos cuestiones históricas.

                La historia económica no siempre anuncia su llegada con cartas credenciales econométricas, aplicando fórmulas matemáticas y hablando a través de tablas numéricas, sino de un relato apoyado en las cifras y en la denuncia de lo verdaderamente hecho.

                Amparo Felipo Orts, historiadora de archivo y de investigación paciente, nos ofrece en Las arcas de la ciudad. Gestión municipal e intervencionismo real en Valencia (1517-1707), publicado en el 2008 por la Universidad de Valencia, un libro más que interesante.

                Apoyándose en las necesarias aportaciones de autores de la talla de Ernest Belenguer y en sus propias pesquisas investigadoras nos ofrece un cuadro sobrecogedor.

                Desde el glorioso reinado de don Fernando el Católico, al menos, el municipio de Valencia ha estado endeudado hasta las cejas. La actuación de muchos munícipes y responsables reales ha sido incompetente y corrupta, con cargos en extremo graves. Las inspecciones o visitas animadas por el rey reiteran los mismos defectos hasta la guerra de Sucesión… que es cuando finaliza el estudio… Después de clamar contra la corrupción, la propia monarquía permite que las mismas familias prosigan en el poder, y no tiene inconveniente en exigir mayores préstamos de una institución quebrada. El sacrificio termina endosándose sobre las capas populares, alzadas durante las Germanies y atosigadas en el siglo XVII con la amenaza y el cumplimiento de las tasas sobre los productos de consumo, los odiados arbitrios.

                Con comportamientos tan ejemplares como no devolver los préstamos, auspiciar delitos como el de la prostitución o no llevar debidamente el obligado registro documental no resulta extraño que instituciones tan bien meditadas (sobre el platónico universo de papel) como el banco municipal de la Taula de canvi o l´almodí para proporcionar grano y pan en tiempos de necesidad quebraran ante los embates de la crisis, no siempre tan responsable de algunos sonoros fracasos como algunos pretenden torticeramente.

                ¿Les recuerda algo todo lo expuesto?

                Y eso que la obra no se concluye de escribir en el entretenido 2014. Una vez más se confirma que la Historia es maestra de la vida junto a otro lugar común: tropezamos siempre con la misma piedra. La constatación del tópico resulta espantosa.

                En otros municipios de las Españas podemos encontrar semejantes comportamientos en su dilatada Historia. Cuando se comparan los resultados de las investigaciones, como la emprendida por Amparo Felipo, vemos que la corrupción ha formado parte de nuestro sistema de gobierno desde hace demasiado tiempo. La historia es la ciencia que habla de los problemas sociales de las personas, y ejercicios como el de Las arcas de la ciudad constituye un modelo de pensamiento cívico, el de la denuncia clara de una vergüenza para todo aquel que quiera enterarse.

                Víctor Manuel Galán Tendero.