LOS REYES MAGOS Y LAS CREENCIAS PERSAS.

06.01.2018 11:40

                

                “Y sucedió que, habiendo nacido el Señor Jesús en Belén de Judá durante el reinado de Herodes, vinieron a Jerusalén unos magos según la predicción de Zaradust. Y traían como presentes oro, incienso y mirra. Y le adoraron y ofrecieron sus dones. Entonces María tomó uno de aquellos pañales y se lo entregó en retorno. Ellos se sintieron muy honrados en aceptarlo de sus manos. Y en la misma hora se les apareció un ángel que tenía la misma forma de aquella estrella que les había servido de guía en el camino. Y siguiendo el rastro de su luz, partieron de allí hasta llegar a su patria.

                “Y salieron a su encuentro los reyes y los príncipes, preguntándoles qué era lo que habían visto o hecho, cómo habían efectuado la ida y la vuelta y qué habían traído consigo. Ellos les enseñaron este pañal que les había dado María, por lo cual celebraron una fiesta  y, según su costumbre, encendieron fuego y lo adoraron. Después arrojaron el pañal sobre la hoguera y al momento fue arrebatado y contraído por el fuego. Mas cuando éste se extinguió, sacaron el pañal en el mismo estado en que estaba antes de arrojarlo, como si el fuego no lo hubiera tocado. Por lo cual empezaron a besarlo y a colocarlo sobre sus cabezas diciendo: “Ésta sí que es una verdad sin sombra de duda. Ciertamente es portentoso el que el fuego no haya podido devorarlo o destruirlo”. Por lo cual tomaron aquella prenda y con grandes honores la depositaron entre sus tesoros.”

                Evangelio árabe de la infancia (compuesto no antes del siglo VI a partir de originales siríacos), pp. 141-142 de Los Evangelios Apócrifos, Madrid, 2006. Edición de Aurelio de Santos Otero.

                Selección de Víctor Manuel Galán Tendero.